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Sigo con lo más básico, esencial diría. Estos ingredientes no pueden faltar en nuestra despensa si queremos ser espontáneos. No es difícil, ya que verdaderamente es poco lo que necesitamos para confeccionar unas galletas:

- Harina
- Azúcar
- Huevos
- Mantequilla

Cierto que admiten variaciones: harina integral, margarina, azúcar moreno... pero lo básico es lo básico.

¿Qué es lo importante a la hora de preparar galletas? Que todos los ingredientes sean frescos y que estén a la misma temperatura, a temperatura ambiente.  (Vale existen las galletas a base de masa quebrada, sin huevo y con mantequilla fría, yo la añado a temperatura ambiente y lo enfrío unas horas en la nevera luego). Es decir, cocer unas galletas requiere un poco de planificación.

Una receta simple se podría obtener mezclando los siguientes ingredientes:
  • 230 gr. mantequilla
  • 225 gr. azúcar
  • 1/2 cucharita sal (si se me olvidó mencionarlo antes, la sal potencia el sabor de la galleta)
  • 1 huevo grande
  • 1 yema grande
  • 280 gr. harina
Se le da forma de serpiente, envuélvase en papel transparente de cocina y refrigérese hasta que endurezca. Esta masa se puede guardar en la nevera o congelar.

Para cocelar, se corta en rodajas de medio cm. y se cuecen en horno precalentado a 180ºC durante 10 min. aproximadamente.
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Pero esto sería muy aburrido. Lo bonito de las galletas es que a la misma receta se le pueden añadir ingredientes y violà, obtenemos otras galletas. Puede ser aroma de vainilla (dos cucharaditas), chocolate negro, con leche o blanco en trocitos, frutos secos (en trocitos o en polvo), dos cucharaditas de café granulado, cacao en polvo...

La imaginación no tiene límites. La cocina es un laboratorio y nosotros somos  el profesor Bacterio. Hay que desprenderse del miedo y tirarse a la piscina.

¡Suerte en vuestros experimentos!

No dejéis de contarme los resultados.




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